No todo es posible, sin embargo, mereces intentarlo
La motivación en el músico es fundamental para conseguir y mantener una actividad que requiere gran sacrificio personal.
Habitualmente, la mayoría de las personas piensan en el músico como un ser enamorado de aquello a lo que se dedica, una persona afortunada por poder trabajar en el campo de su predilección o estudiar lo que más le gusta. Una persona extremadamente afortunada, feliz, una persona que no tiene dudas existenciales.
Pero todos los que nos dedicamos a esto, sabemos que no es cierto, la mayoría hemos sufrido crisis, si bien en el camino y persecución de lo que anhelábamos, siendo estudiantes o cuando profesionales.
Todos los días podemos ver a músicos cansados, músicos que han perdido la ilusión, músicos que una vez al día, no dudarían en volver a su pueblo con su familia y trabajar en cualquier empleo; músicos que cambiaran su puesto en la orquesta por un puesto en un conservatorio, o su puesto en el conservatorio por un puesto en cualquier orquesta profesional. Estudiantes que en su último año de carrera, no encuentran ya fuerzas para preparar su recital de graduación.
Lo mismo pasa con quienes aun no inician ese camino, pero se encuentran en búsqueda de una identidad musical. Se enfrentan a obstáculos tales como, impedimentos económicos, opiniones criticas e increpantes de quienes los rodean, incertidumbres, frustraciones, por mencionar algunos.
Seguro que cada uno tiene una razón que, para sí mismo, es lo suficientemente importante como para sentirse así, esto no lo vamos a poner en duda. Pero te invitamos a que atiendas esta frase; ”el problema ya no es el problema, el problema ahora es buscar la solución”.
No le des más vueltas a lo que sea o creas “que te llevo a esta situación”, sino, a “como salir de
ella”. Tienes dos opciones, por una parte, abandonar y, por otra, volver a estar contento con aquello que haces o con lo que deseas ser y pretendes alcanzar. Esto es lo que llamamos: volver a estar motivado, pero, ¿Qué es la motivación?
Analicemos la palabra; viene del latín, motivus (‘movimiento’), y el sufijo -ción (‘acción’, ‘efecto’,) es aquello que orienta, mantiene y determina la conducta de una persona, ya sea de manera consciente o inconsciente, hacia la consecución de un objetivo.
Personalmente la definición que más me gusta es la que dice: "La motivación es el motivo para la acción". Si te encuentras en un momento en el que has dejado de sentir el impulso para seguir o la ilusión por tocar, no te preocupes, es algo habitual que entra dentro de los procesos normales en la evolución vital de un ser humano.
Se considera que un músico de élite, a sus 20 años, a estudiado 10,000 horas en la soledad de su habitación, de forma empírica y autodidacta.
- ¿Qué motivo impulsa a una persona a realizar este sacrificio, y además realizarlo con gusto?
- ¿Cuánto tiempo ese mismo motivo puede seguir empujándonos?
- ¿Puede cambiar este motivo a lo largo de nuestra carrera?
Los cambios en la vida son constantes, las prioridades y necesidades que teníamos ayer pueden haber cambiado hoy. Lo que antes nos empujaba a sacrificarnos, bien fuera por agradar a nuestros padres o nuestro profesor, o por ser el mejor instrumentista de nuestra generación, hoy puede ya no ser suficiente como para despertar nuestra ilusión y pasión.
Revisar nuestros valores, nuestras necesidades y prioridades, es vital para seguir teniendo la fuerza, la voluntad, el motivo para la acción, que también es parte del entrenamiento mental para la actuación.
No te preocupes si has perdido la motivación, se trata algo totalmente normal. Revisa qué te llevo hasta aquí, busca e intenta encontrar en tu interior que nuevo motivo puede, ahora, darte la fuerza necesaria para seguir trabajando y continuar superándote con ilusión.
Finalmente, recuerda que estamos contigo, que no todo es posible, pero mereces intentarlo.
Máxima
"Sin música la vida sería un error".
Friedrich Nietzsche, filósofo y músico alemán.